El modelo de construcción estatal chileno ha sido considerado por la historiografía un ejemplo para la región, por su transición más temprana y relativamente más pacífica del régimen colonial al republicano y por la consolidación de un modelo político centralizado. Según esta visión, se trataría de una forma particular respecto al camino que tomaron el resto de las repúblicas latinoamericanas tras la independencia de la monarquía española, en las que se habría experimentado de manera reiterada con diversos tipos de diseño estatal, tales como confederaciones y repúblicas federales.Siguiendo esta línea, se propone justamente cuestionar y analizar la implementación de este modelo estatal fuertemente centralizado, característico de la organización republicana en Chile. En efecto, desde una perspectiva histórica de larga duración, la imposición del modelo centralista redundó en un afianzamiento del Estado, pero este proceso fue impugnado en el ámbito político y social (dos guerras civiles en una década y numerosos levantamientos y motines populares), y generó fuertes resistencias locales, particularmente en las provincias del norte y del sur, como lo demuestran las guerras civiles de 1851 y 1859, cuando las provincias se levantaron en armas contra el gobierno central.La propuesta que planteamos implica necesariamente analizar desde una perspectiva histórica la noción de Estado, y ponerla en diálogo con algunos debates teóricos sobre su naturaleza.